Imagina poder vivir en el departamento que sueñas antes de comprarlo. Conocer sus espacios, recorrer el barrio, sentir el ritmo del sector… y al mismo tiempo estar avanzando hacia ser propietario. Ese es el corazón del arriendo con compromiso de compra, una fórmula que ha comenzado a ganar terreno en Chile y que podría representar una alternativa real para quienes hoy enfrentan dificultades para acceder a un crédito hipotecario inmediato.
A lo largo de este artículo te explicamos en qué consiste este modelo, cómo funciona, cuáles son sus ventajas y qué debes considerar si estás pensando en dar este paso.
¿Cómo funciona el arriendo con compromiso de compra?
El arriendo con compromiso de compra —también conocido como “lease to own” o “rent to buy”— es un acuerdo que permite arrendar un inmueble por un período determinado, con la posibilidad de comprarlo al finalizar el contrato o incluso durante el arriendo. En términos simples, es una mezcla entre arrendamiento y compraventa.
Generalmente, este modelo se formaliza mediante un contrato que establece:
- El valor del arriendo mensual.
- El plazo del contrato (por ejemplo, 12, 24 o 36 meses).
- El precio de venta pactado del inmueble.
- Las condiciones bajo las cuales se puede ejecutar la opción de compra.
- Qué porcentaje del arriendo (si aplica) se abona posteriormente al pie o precio de compra.
¿Quiénes se benefician de este modelo?
Este tipo de solución inmobiliaria puede resultar particularmente útil para personas que aún no califican para un crédito hipotecario, pero que están trabajando para lograrlo. Por ejemplo:
- Jóvenes profesionales que aún no han consolidado un historial financiero fuerte.
- Personas con ingresos variables, como independientes o emprendedores.
- Familias que necesitan tiempo para reunir el pie.
- Compradores que quieren probar el barrio antes de invertir.
En contextos de alta inflación o restricciones de acceso al crédito, el arriendo con compromiso de compra se vuelve aún más relevante.
Principales ventajas del arriendo con compromiso de compra
1. Vivir desde ya en tu futuro hogar
Una de las grandes ventajas es que puedes habitar el inmueble desde el día uno, sin tener que esperar a completar todos los requisitos para comprar.
2. Congelar el precio de compra
Muchas veces, el contrato establece el valor de compraventa desde el inicio. Esto puede ser muy beneficioso si se espera que los precios de las propiedades suban en el tiempo.
3. Abonar parte del arriendo al pie
Los pagos mensuales se descuentan del valor de compra o se suma al pie, lo que permite acumular capital mientras se arrienda.
4. Más tiempo para ordenar tus finanzas
Si hoy no cumples con los requisitos del banco, este sistema te da una ventana de tiempo para mejorar tu perfil financiero sin dejar de avanzar hacia tu objetivo de compra.
¿Qué debo considerar antes de firmar un contrato?
Aunque atractivo, el arriendo con compromiso de compra también exige responsabilidad y claridad. Aquí algunas consideraciones clave:
Condiciones del contrato
Lee detenidamente cada cláusula. Revisa si el precio de compra es fijo, si puedes adelantar la compra antes del plazo o qué ocurre si decides no comprar.
Aplicación del arriendo al precio
No todos los contratos aplican parte del arriendo al pie. Es importante que esto esté expresamente detallado. De no ser así, podrías estar pagando solo por el uso, sin acumular valor.
Mantenimiento y mejoras
¿Quién se hace cargo de reparaciones mientras arriendas? Asegúrate de definir responsabilidades, especialmente si el contrato es de largo plazo.
Financiamiento futuro
Aunque el arriendo te permite ganar tiempo, eventualmente deberás calificar para un crédito hipotecario si quieres comprar. Considera mejorar tu puntaje crediticio, consolidar ingresos y reducir deudas en ese período.
¿Qué diferencias hay con un arriendo tradicional?
A diferencia de un arriendo normal —donde pagas por el uso sin expectativas de compra— el arriendo con compromiso de compra incluye un acuerdo vinculante o preferencial para adquirir el bien raíz.
Además, al existir una intención de compra, las condiciones pueden incluir mayor compromiso por ambas partes. Es decir, tú como arrendatario tienes el derecho preferente de compra, y el propietario no puede vender la propiedad a otra persona mientras dure el contrato.
¿Y si no quiero comprar al final del contrato?
Esto dependerá del tipo de acuerdo que hayas firmado. Existen dos formas comunes:
- Compromiso opcional: puedes decidir si compras o no al terminar el arriendo. Si no lo haces, el contrato se termina como cualquier arriendo convencional.
- Compromiso obligatorio: en este caso, firmaste desde el inicio un acuerdo de compraventa futura. Si no compras, podrías tener que pagar multas o perder parte del dinero abonado.
¿Está disponible esta modalidad en proyectos nuevos?
Cada vez más inmobiliarias están evaluando este tipo de opciones como una forma de facilitar el acceso a la vivienda, especialmente para quienes se ven excluidos del financiamiento bancario inmediato. Sin embargo, no todos los proyectos aplican esta modalidad, y las condiciones pueden variar según la empresa.
En el caso de Inmobiliaria Paz, creemos que ofrecer caminos alternativos hacia la propiedad puede ser una forma concreta de responder a las nuevas realidades del mercado y las necesidades de nuestros futuros propietarios.
¿Vale la pena?
Esta opción puede marcar la diferencia entre postergar indefinidamente la compra de su primera vivienda o dar un paso firme hacia ella.
Es importante evaluar con calma, consultar con asesores financieros y revisar muy bien las condiciones. Como toda decisión inmobiliaria, requiere planificación, pero puede ser una gran oportunidad para transformar el arriendo en propiedad.
¿Quieres saber si un proyecto de Inmobiliaria Paz puede adaptarse a esta modalidad? Contáctanos y conversemos sobre tus opciones para vivir hoy y comprar mañana.